Viernes 20 de Diciembre, 21 hrs.
Sala Athaualpa - Teatro El Galpon
Profesores de Arte Escénico - VICKY RODRIGUEZ CARTAGENA / GUSTAVO ANTUNEZ
Escuela de Actuación de Vicky Rodriguez y Gustavo Antúnez
ELENCO
MARIA :Pupila del prostíbulo - Valentina Perez
JACINTA:Pupila del prostíbulo - Mary Rondan
AURORA:Pupila del prostíbulo - Alejandra Rivero
ROSA: Pupila del prostíbulo - Camila Antúnez
JORGELINA:Pupila del prostíbulo - Micaela Vallarino
DOÑA PURA:La dueña del prostíbulo - Ines Panero
VICTOR : hijo de Pura - Lucas Añon
MARAGATA:Vieja celestina - Graciana Mauris
LA GRINGA: Vieja prostituta - Amalia Migues
AMELIA: Se encarga de la limpieza - Maria Laura Correa
PASCUAL:Un muchacho, empleado de tienda - Matias De Prado
PAGOLA:El “marido” de Pura, dueño del prostíbulo y del garito. Nicolas Bagnardi
ALBERTO:“El Porteño”, “Novio” de Jorgelina - Ignacio Cura
HORACIO:Un muchacho, empleado de tienda. - Justino Fraga (Generacion 2022)
MILANO:Hombre fuerte del Bajo. - Daniel Benseñor
TIGRE:Su guardaespaldas. - Joaquin Arispe (Taller Adolescentes)
DOÑA JULIA - borracha - Gabriela Elhordoy
CELOSÍA:Pasador de drogas - Alejandro Rey
DOÑA JUSTA:Dueña del boliche. - Maria Isabel Sapriza
COMISARIO: Sergio Villanueva
ÑATO: Sergio Villanueva
Por el autor, escrito para el estreno, 1980:
Hacia 1918, y de acuerdo a la versión de Ramón Collazo, testigo de primera fila, veraz y preciso, el Bajo era una zona de Ciudad Vieja, polígono irregular limitado al Este por Bartolomé Mitre, Yerbal, Ciudadela; al sur por Maldonado, Juan C. Gómez, Camacuá; Brecha al Oeste, y Buenos Aires, al norte.
Ya estaban allí, casi desde siempre, el Templo Inglés y el Teatro Solís, que aún están; el Royal, el Mercado Central y la muralla, que ya no, y la Torre de los Panoramas que estaba y está, pero a la que, seguramente, casi nadie del barrio conoció. Un poco más arriba, por Treinta y tres casi Buenos Aires, vivió años antes, serio, grave y triste (seguro) quien pudo haber sido un cronista de excepción del Bajo, pero que no lo fue porque, también seguramente, no debe de haberlo conocido.
El vecino era Rodó, claro.
Ese territorio fue colorido y bullicioso escenario con cien rincones diversos en los que se dio, día a día, la tragicomedia de la vida prostibularia, la tensión del garito nocturno, el aturdimiento de los bailongos de rompe y raja, los olorosos y no muy bucólicos tambos, los vendedores de mil cosas y sus pregones, los siniestros mercaderes de la droga, los payadores y sus enfrentamientos arreglados, el cuento del tío y la rapiña, el crimen, incluso y el gentío ( a un tiempo actores y espectadores) que bajaba por Bartolomé Mitre hacia el atractivo, incitante, equívoco, y para nosotros mítico Mundo del Bajo.
Fue decayendo y desapareció; de todo aquello, hoy queda , y sólo por las noches, las calles desiertas y el antiguo viento de la desolación. De aquel Montevideo lejano, muchas cosas cambiaron. Pero el amor y la alegría, el humor y la bondad, que es de los hombres, sigue existiendo. Y es ello lo que, creo ( y ojalá) permitirá que "Allá en el Bajo" viva con su acontecer no muy novedoso pero fuerte y cambiante, en el escenario de este Teatro.